Atrapa al pez dorado
El deseo para una idea es como el cebo. Cuando pescás tenés que ser paciente. Cebás el anzuelo y después esperás. El deseo es el cebo que atrae a los peces, a las ideas.
Lo lindo es que cuando atrapás un pez que te gusta, incluso aunque sea chiquito – un fragmento de una idea -, ese pez te va a conducir a otro pez y todos se van a enganchar en el primero. Ya estás en marcha. Muy rápido se van acumulando cada vez más fragmentos y emerge el cardumen. Pero todo empieza con el deseo.
(David Lynch)
Gracias Silvia, Javier y Lucía por recibirnos y hacernos sentir como en casa.
(22 imágenes – registro colectivo)
Video de Lucía Cabrera